> El Patio

Conocí este restaurante siguiendo la recomendación de mi colega y amigo Pietro Sorba, que le dedicó una nota en la revista Viva de los domingos. Y no podía ser de otra manera, todo resultó a pedir de boca. El Patio es una parrilla de barrio que reúne dos requisitos fundamentales para todo comensal porteño amante de la parrilla que se precie. Los productos son de apreciable calidad y la relación con el precio ideal para darse el gusto de salir a comer sin fracasar en el intento.

La parrilla está a la vista, el local es muy sencillo, rústico, no muy amplio, pero mucha gente opta por disfrutar de las mesas al aire libre, mientras el tiempo lo permita. Están las clásicas opciones para empezar, como chorizo, morcilla, provoleta, y para seguir el bife de chorizo entero, para compartir, o por media porción, muy oportuna para los que no comen tanto, y asado, vacío, entraña, en fin, los cortes clásicos habituales. Todo generoso y en el punto pedido, si no es acercado por el camarero, muy asediado en cierto momento, por el parrillero o el encargado en persona. La buena voluntad, sobra.

Las guarniciones, papas fritas crocantes, ensaladas frescas, comparten protagonismo con la tortilla de papas, pollo o bondiola al verdeo, milanesas, supremas y pastas. Postres porteños tradicionales. Lista de vinos breve, pero consulte por opciones fuera de carta. Aceptan reservas. Si no reservó y no quiere esperar, vaya temprano (20-04-2017). 

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