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> Pasión de multitudes

Una de las comidas argentinas que marchan al tope las preferencias son las picadas. En el ámbito porteño, más específicamente en el barrio de Núñez, La Tábola hace honor a su nombre.  Además de una amplia variedad de propuestas para comer in situ o para llevar, también ofrece sándwiches, menú de mediodía  y algunos platos típicos del mundo. En un ambiente cálido, con estilo de cantina alemana, todo se puede acompañar con excelente cerveza tirada como la roja Kotsch, imperdible.

Desde hace 14 años especializada en seleccionar fiambres y quesos de calidad, se abastece de excelentes productos regionales del país (Mercedes, Tandil) e importados, como el jamón crudo ibérico estacionado 12 meses. Para tener una idea, citemos algunas de las exquisiteces artesanales:  salame de campo criollo y milancito, leberwurst, pavita, lomito horneado con finas hierbas,  chorizo español grand vela, quesos de campo saborizados con ají albahaca o pimienta, quesos ahumados, lomo embuchado con queso brie, lomo de jabalí, bondiola serrana de Tandil, bresaola, queso de cabra, ideales para acompañar con pancitos o baguettes horneadas. Así, mezcladitos, como vienen en la picada.

Además hay brochettes, tapeos y once variedades de tentadores sándwiches para llevar o degustar en el lugar. La única objeción, el horario reducido. Sólo abre de lunes a sábado de 11 a 20. Paciencia.

Congreso 1599 / 4781-5933 / http://www.la-tabola.com.ar

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